Tras la salida de Steve “Zetro” Souza, el regreso de Rob Dukes al micrófono no solo reavivó una etapa significativa en la historia del grupo, sino que también le dio un impulso renovado a Gary Holt, guitarrista fundador y principal compositor del conjunto. En una entrevista con el programa Full Metal Jackie, Holt abordó el proceso de esta transición con la franqueza que caracteriza su trayectoria: no se trató de un movimiento planeado, sino de una respuesta directa a una desconexión creciente dentro de la banda.
La reincorporación de Dukes representa algo más que una decisión pragmática. Según Holt, mantener una dinámica funcional y honesta entre los integrantes se volvió prioritario. Con una relación de amistad consolidada desde hace años, la elección de traer de vuelta a Dukes estuvo marcada tanto por la confianza como por el conocimiento compartido. “A mis 60 años no quiero conocer gente nueva”, dijo Holt entre risas, aludiendo a la comodidad de trabajar con alguien de su círculo cercano.
Lejos de tratarse de una solución nostálgica, el regreso de Dukes ha impactado directamente en la energía creativa de Holt. Con la banda actualmente en proceso de grabación para un nuevo disco —programado para 2026—, el guitarrista reveló que la fuerza vocal de Rob ha elevado el nivel del material: “Sus voces en estas nuevas canciones van a volarle la cabeza a la gente”.
A pesar del cambio en la voz principal, Holt insiste en que el núcleo creativo de Exodus permanece intacto. La banda escribe para sí misma, sin adaptar el estilo al vocalista de turno. Sin embargo, la presencia de Dukes ha funcionado como catalizador emocional y operativo. En sus palabras, el momento es tan impredecible como vital: “Quién sabe si eso pasará. Podría atropellarme un auto y entonces tener un álbum póstumo: ‘La última actuación de Gary Holt’”.