El Príncipe de las Tinieblas, Ozzy Osbourne, reveló en su libro de memorias Last Rites, publicado hoy, los momentos de incertidumbre que vivió previo a su presentación final en el escenario del Back To The Beginning. En medio de problemas de salud, el vocalista de Black Sabbath compartió cómo su esposa y mánager, Sharon Osbourne, manejó la situación sin margen para improvisaciones.
La hospitalización que generó preocupación por el concierto
Ozzy Osbourne describió en Last Rites cómo, tras llegar a Inglaterra, enfrentó un nuevo episodio médico que lo mantuvo alejado de los preparativos. “Tres días después de que por fin llegáramos a Inglaterra, volví al hospital. La tensión arterial me tuvo allí ocho días, durante los cuales no pude hacer otra cosa que preocuparme. Porque el concierto no paraba de crecer”, escribió el músico.
El evento, que se presentó como un cierre para su carrera, sumaba cada vez más figuras del heavy metal. “A medida que se anunciaban todos esos grandes nombres (Guns N’ Roses, Metallica, Steven Tyler de Aerosmith), pensaba: ’Carajo, esto va a ser como la respuesta del metal al Live Aid’…Acostado en la cama por las noches pensaba: ‘No puedo ir, no puedo hacerlo’. No paraba de decirle a Sharon que sería mejor grabar un video, porque si no habría un escenario vacío. Ella solo me miraba como si estuviera loco. Me conoce mejor que yo mismo. Sabía que lo único que tenía era miedo”.
Estos detalles emergen de un extracto compartido en The Times, donde Osbourne detalla la presión acumulada por el tamaño del show del Back To The Beginning.
La posición firme de Sharon Osbourne ante la crisis
Sharon Osbourne, quien ha gestionado la carrera de su esposo durante décadas, respondió con claridad a las sugerencias de Ozzy. ‘Mira, no habrá plan B. Ni video, ni nada grabado de antemano. Si no puedes cantar esa noche, simplemente habla con el público y dale las gracias. Lo único que tienes que hacer es subir ahí y ser Ozzy’”, le dijo ella, según relata el libro.
Esta decisión reflejó la confianza de Sharon en la presencia de Ozzy sobre el escenario, incluso en condiciones adversas. Al final, el Príncipe de las Tinieblas pudo actuar, y el momento se registró como parte de su legado en el heavy metal. Last Rites ofrece una visión interna de estos eventos, compilados en un volumen póstumo que sale a la luz hoy.
