En una noche que combinó amor y brutalidad, una pareja de Pittsburgh selló su unión en el corazón de un mosh pit durante un concierto de Cannibal Corpse. Lo que pudo haber sido solo otra fecha de la gira norteamericana de los íconos del death metal se convirtió en un momento histórico para Erica y Christopher, quienes se juraron amor eterno rodeados de riffs aplastantes y un mar de metaleros en el Stage AE. Aquí te contamos cómo esta boda única, bautizada como las “Nupcias Corruptas”, se robó el show.
Un “Sí, Quiero” en el Ojo del Huracán
Mientras Cannibal Corpse desataba la furia de temas como Unleashing the Bloodthirsty, el pogo en Pittsburgh tomó un giro inesperado. En lugar del clásico wall of death, el círculo se abrió para dar paso a una ceremonia tan caótica como romántica. Erica y Christopher, firmes en el centro del torbellino de cuero, tachas y sudor, intercambiaron votos frente a una multitud que vibraba con la energía del death metal. Los asistentes, lejos de ser simples espectadores, se convirtieron en testigos de un momento que encapsuló la pasión y la camaradería de la comunidad metalera.
Erica compartió su emoción en redes sociales: “¡Lo hicimos! Nos casamos en el mosh pit durante el concierto de Cannibal Corpse en Pittsburgh. La comunidad del metal es única, y el apoyo que recibimos fue increíble”. La pareja agradeció a quienes hicieron posible esta boda poco convencional, incluyendo a Doc Show, quien ofició la ceremonia, a Brandon Young por llevar los anillos, y a Kristyn Pierfelice por proteger el certificado de matrimonio. Un guiño especial fue para Alex Webster, bajista de la banda, y Barry Mull, quien facilitó que varios metaleros, incluido Webster, firmaran el certificado como testigos.
Una Gira Brutal y un Momento Inolvidable
El concierto en Pittsburgh fue parte de la gira norteamericana de Cannibal Corpse, que arrancó el 28 de marzo en Quebec y contó con Carcass y los titanes del metal progresivo Meshuggah como cabezas de cartel. Esta última banda está promocionando su aclamado disco Immutable, y la combinación de estos gigantes del metal extremo convirtió cada fecha en una experiencia inolvidable. Sin embargo, la boda de Erica y Christopher en el Stage AE se llevó todas las miradas, demostrando que el death metal no solo es sinónimo de intensidad, sino también de comunidad y momentos únicos.
La pareja no solo celebró su amor, sino que lo hizo rodeada de una hermandad que entiende que el metal es más que música: es un estilo de vida. “No podría haber sido más perfecto”, escribió Erica, y no es difícil entender por qué. Casarse en un mosh pit, con el rugido de Cannibal Corpse como banda sonora, es el sueño de cualquier metalero.