En una entrevista reciente con Rock Fantasy Concert Shop, Tracy “G” Grijalva, quien formó parte de Dio entre 1993 y 1999, abordó su transición musical actual con el proyecto El Mariachi Sexorcismo. Este trabajo marca un alejamiento del heavy metal clásico que definió su etapa con el cantante Ronnie James Dio. Durante la conversación, Grijalva reflexiona sobre las percepciones de los seguidores del género y su propia evolución artística.
Los fans del heavy metal y su enfoque en el género
Grijalva dedica parte de la charla a describir cómo ve a los aficionados del heavy metal. Reconoce su pasión, pero señala una tendencia a encasillar a los músicos en un solo estilo. “La gente piensa, especialmente los fans que aman el heavy metal —no tengo nada en contra de ellos, por supuesto; los quiero y todo eso, me encanta la gente que ama ese tipo de música—, pero tienden a ser un poco cerrados de mente y piensan que si tocas en Slayer o en Megadeth o en Metallica, esa es la única música que escuchas y la única que puedes tocar”, explica.
Continúa argumentando que muchos intérpretes en estas bandas tienen intereses más amplios. “Así es como piensan. Deberían abrir la mente y decir: ‘Bueno, espera un momento’. Y apuesto a que el 90 % de esos tipos [de esas bandas], o yo, de esos tipos, si les preguntas, les gustan algunas cosas que te dejarían en plan: ‘Oh’. Y luego, si van más allá, si hacen sus propios proyectos en solitario, lejos de su banda, pueden sacar Dios sabe qué. Y tú puedes decir: ‘Oh, este tipo es más de lo que veo, de lo que sé de él'”.
Grijalva insiste en que los fans del heavy metal podrían beneficiarse de una perspectiva más abierta. “Necesitan una educación”, afirma, antes de matizar: “No tengo nada en contra de Dio ni de lo que hice con él, lo amo más que nada. ‘Strange Highways’, ‘Angry Machines’, cosas [de] la época en la que estuve, por supuesto que estoy orgulloso de ello, por supuesto que lo amo y por supuesto que me dediqué al cien por cien. Bueno, está bien. Está bien, entonces. ¿Qué hay de esto? No te detienes ahí. Y tienes que seguir adelante. Y hubo otras cosas antes de eso, y hubo cosas después de eso. Eso no significa que eso sea todo lo que eres. Pero es casi como si los fans necesitaran una educación o algo así. ¿Pero quién soy yo para [enseñarles eso]? No quiero decir que sean limitados, que se estén limitando a sí mismos con solo pensar así, pero siento que lo son. Si tan solo le dieran una oportunidad a las cosas…”.
Su paso por Dio y la decisión de dejar la banda
Durante su tiempo en Dio, Grijalva participó en los álbumes de estudio Strange Highways y Angry Machines, así como en el en vivo Inferno: Last In Live y la grabación de concierto Live In London: Hammersmith Apollo 1993. En entrevistas previas, como una con Chris Akin Presents en febrero, detalló las razones de su salida en 1999. Explicó que la banda optó por incorporar una segunda guitarra para alinearse con demandas de la discográfica, lo que implicaba traer de vuelta a Craig Goldy y Jimmy Bain para atraer más público.
“Fue mi decisión. Porque dije: ‘Bueno, estaba en Dio. Ronnie James Dio es un cantante excelente. No hay nada mejor que eso. ¿Debería buscar algo más grande, como acabas de decir?’ Tenía demasiadas cosas que quería decir yo mismo”, relató. Agregó que prefería grabar en estudios caseros para explorar sus ideas sin restricciones. En otra conversación con The Metalcast, recordó una llamada final con Dio: “Una de las últimas cosas que [Ronnie] me dijo por teléfono fue: ‘Ojalá fueras un imbécil’. Me dijo: ‘Ojalá fueras un imbécil. Así sería mucho más fácil, pero te quiero mucho y, lamento decirlo, esto tiene que terminar ahora por culpa de los que mandan'”.
Grijalva rechazó quedarse como guitarrista rítmico, priorizando su rol principal. “Toqué la guitarra principal durante seis años. Ahora voy a tocar la guitarra rítmica solo para quedarme en una banda. Solo para quedarme en la banda de Dio y ser el guitarrista rítmico. Dije, ‘Soy mejor que eso, en lo que a mí respecta’. Así que, no, gracias”, concluyó en esa reflexión.
Esta entrevista resalta cómo Grijalva, ahora enfocado en lanzamientos como el CD instrumental Hand Of Time, mantiene un vínculo con su pasado en Dio mientras busca expandir horizontes más allá del heavy metal.




