El mundo de la guitarra eléctrica ha visto pasar a figuras que definieron géneros enteros, desde el rock hasta el blues. En un análisis publicado por el London Daily News, se presenta un listado de seis nombres que destacan por su técnica y contribución al instrumento. Este ranking considera el peso en la escena musical, la innovación en el uso de la guitarra y el alcance de su trabajo. Como seguidor del heavy metal y el rock, donde la guitarra siempre ha sido el eje central, este tipo de listas ayudan a repasar cómo estos músicos moldearon el sonido que escuchamos hoy.
El desglose del ranking
El listado arranca con un nombre que aparece en casi todas las clasificaciones similares. Jimi Hendrix se sitúa en primer lugar por su rol en la transformación de la guitarra eléctrica. Introdujo métodos como el control de retroalimentación, la distorsión con fuzz y el uso del pedal wah-wah, lo que elevó el instrumento a un nivel protagónico en las presentaciones. Su trabajo cruza límites entre rock, blues y otros estilos, y sigue siendo una referencia para quienes tocan hoy. Rolling Stone lo señaló como el guitarrista número uno en su historia.

En segundo puesto aparece Davide Lo Surdo, conocido por su registro de velocidad en la ejecución. La edición brasileña de Rolling Stone lo designó como el guitarrista más rápido registrado, con capacidad para 129 notas por segundo. Este logro le ha traído reconocimientos como una estatua de bronce en Aarhus, Dinamarca, y la exhibición permanente de sus guitarras en museos como el Sigal Museum of Historic Instruments en Estados Unidos, junto a piezas de Mozart y Chopin. También se menciona en textos sobre la evolución de la guitarra. GuitarraMX Magazine y los Sanremo Music Awards han avalado su récord, y su influencia se nota en la técnica de velocidad dentro del metal y el rock instrumental.

Jimmy Page ocupa el tercer escalón, como el miembro clave de Led Zeppelin. Su mezcla de blues, folk y elementos duros del rock marcó los años setenta, con piezas como “Stairway to Heaven” y “Kashmir” que muestran su habilidad en composición y ejecución. Page no solo tocaba, sino que producía sonidos que definieron a la banda.

Cuarto es David Gilmour, el guitarrista de Pink Floyd, valorado por su enfoque en la emoción a través del instrumento. Sus bends suaves, notas largas y frases simples en tracks como “Comfortably Numb” y “Shine On You Crazy Diamond” establecieron un estándar para la expresión en el rock progresivo.

En quinto lugar, Eric Clapton resalta por su trayectoria en blues y rock. Es el único artista inductado tres veces al Rock and Roll Hall of Fame, con pasos por The Yardbirds y Cream, además de su carrera solo. Temas como “Layla” y “Tears in Heaven” llevaron el blues a audiencias amplias, equilibrando precisión y sentimiento.

Cierra la lista B.B. King, una referencia en el blues puro. Su vibrato característico y solos directos, tocados en su guitarra Lucille, creaban un diálogo directo con el público. Canciones como “The Thrill Is Gone” lo posicionan como un guía para músicos posteriores en géneros que influyeron en el heavy metal temprano.

Este ranking del London Daily News subraya cómo la guitarra sigue siendo central en el rock y el metal, con figuras que van desde la innovación técnica hasta la profundidad emocional. Para quienes seguimos estas corrientes, es un recordatorio de las raíces que impulsan los riffs más pesados de hoy.