Slayer es una banda estadounidense de thrash metal que se formó en 1981 y que se caracterizó por su música agresiva, sus letras violentas y su imagen provocadora. Slayer es considerada una de las cuatro grandes del thrash metal, junto con Metallica, Megadeth y Anthrax, y ha vendido más de 20 millones de discos en todo el mundo.
Sin embargo, en 2018, Slayer anunció que se retiraría de los escenarios tras una gira mundial de despedida que duró hasta 2019. ¿Qué motivó esta decisión? ¿Qué factores influyeron en la separación de Slayer? ¿Qué ha sido de sus miembros desde entonces? Y lo más importante, ¿qué significa el reciente anuncio de su regreso para un par de conciertos en 2024?
Los motivos de la separación
No hay una respuesta única ni oficial a la pregunta de por qué se separó Slayer, pero se pueden señalar algunos posibles motivos que contribuyeron a esta decisión.
- El primero y más evidente es el cansancio y el desgaste de más de tres décadas de carrera musical, giras interminables, presión mediática y exigencia creativa. Slayer es una banda que siempre se ha mantenido fiel a su estilo y a sus fans, pero eso también implica un alto nivel de compromiso y sacrificio. En una entrevista de 2016, el vocalista y bajista Tom Araya, de origen chileno, confesó que extrañaba a su familia y que le gustaría pasar más tiempo con ellos. Araya también sufrió problemas de salud que le obligaron a someterse a una cirugía de cuello en 2010 y que le impidieron seguir haciendo headbanging en sus conciertos.
- El segundo motivo tiene que ver con la muerte de uno de los fundadores y guitarristas de Slayer, Jeff Hanneman, en 2013. Hanneman falleció a los 49 años debido a una insuficiencia hepática provocada por una fascitis necrotizante, una infección de tejidos blandos que contrajo tras ser mordido por una araña. Hanneman era el principal compositor de Slayer y el responsable de algunos de sus temas más emblemáticos, como “Angel of Death”, “Raining Blood” o “Seasons in the Abyss”. Su ausencia dejó un vacío irreemplazable en la banda, que tuvo que recurrir a otros guitarristas como Gary Holt de Exodus o Pat O’Brien de Cannibal Corpse para completar su formación. Aunque Slayer siguió adelante con su música, es probable que la pérdida de Hanneman afectara a su moral y a su cohesión como grupo.
- El tercer motivo tiene que ver con las diferencias creativas y personales entre los miembros de Slayer, especialmente entre Araya y el otro guitarrista y líder de la banda, Kerry King. Araya y King son los únicos miembros originales que permanecieron en Slayer hasta el final, pero también los que más discrepancias han tenido a lo largo de su trayectoria. Mientras que Araya se ha mostrado más abierto a experimentar con otros géneros musicales, como el punk o el rock alternativo, y a expresar sus opiniones políticas y religiosas, King se ha mantenido más fiel al thrash metal y al satanismo que caracterizan a Slayer. Estas diferencias se hicieron más evidentes en el último álbum de estudio de Slayer, Repentless, lanzado en 2015, que fue el primero sin la participación de Hanneman y que recibió críticas mixtas por parte de los fans y de la prensa especializada.
El legado de Slayer
A pesar de su separación, Slayer ha dejado un legado imborrable en la historia del metal y de la música en general. Slayer ha sido una banda pionera, innovadora y revolucionaria, que ha influenciado a numerosos artistas de diversos géneros, como Pantera, Sepultura, Slipknot, Lamb of God, Behemoth o System of a Down. Slayer ha sido también una banda polémica, que ha generado controversia por sus letras sobre temas como el nazismo, el asesinato, el terrorismo, la guerra o el anticristianismo. Slayer ha sido, en definitiva, una banda única, que ha sabido crear un sonido propio, reconocible y potente, que ha trascendido las modas y las tendencias, y que ha creado una legión de seguidores fieles y apasionados.
El regreso de Slayer
Este 21 de febrero de 2024, Slayer sorprendió al mundo al confirmar su regreso a la música a cinco años de su separación. La banda anunció que realizaría dos conciertos en 2024: el 22 de septiembre en el Riot Fest de Chicago y el 27 de septiembre en Louder than Fest en Louisville. Estos serán los primeros conciertos de Slayer desde el año 2019, cuando concluyeron su gira de despedida por todo el planeta.
¿Qué significa este regreso? ¿Es solo un gesto puntual o el inicio de una nueva etapa? ¿Qué formación tendrá Slayer para estos conciertos? ¿Qué repertorio tocarán? ¿Qué reacción tendrán los fans? Todas estas preguntas aún no tienen respuesta, pero lo que sí está claro es que Slayer ha vuelto a despertar el interés y la expectación de millones de personas que esperan ver de nuevo en acción a una de las bandas más legendarias del metal.