Cattle Decapitation se ha convertido en sinónimo de metal extremo en la última década. Desde el grindcore hasta el brutal technical death metal, esta banda originaria de San Diego ha sabido moverse en la vena más frenética del género.Una prueba de ello es su décimo disco, “Terrasite”, el cual salió hace unos días y no ha pasado desapercibido dentro de la comunidad metalera. ¿A qué se debe esto?
El disco anterior, “Death Atlas”, dividió opiniones debido a la dirección musical que tomaron. Esto, sumado a la pandemia (predicha por la banda en el tema “Bring Back the Plague”), que se llevó a muchas personas conocidas de los miembros del grupo, y el estrés que causó en la sociedad todo lo relacionado con el Covid, influyeron fuertemente en Cattle para poder traer una producción sólida de principio a fin.
Continuando con la temática de “Death Atlas”, el apocalipsis ha llegado y de los cuerpos de los humanos emergen los terrasite, cucarachas humanoides asustadas y listas para llevar a cabo su misión de acabar con el mundo en el que habitan.
El disco sabe acompañar esta temática con la música más rápida e implacable que la banda ha creado. Si bien hay momentos de tranquilidad, estos solo sirven para tomar aire antes de adentrarse nuevamente en el ambiente postapocalíptico propuesto por la banda, tanto musical como líricamente, con letras poco optimistas y llenas de crítica hacia la humanidad.
Los temas no tienen desperdicio y toman lo mejor de sus tres últimas entregas: la brutalidad y técnica de “Monolith of Inhumanity”, la atmósfera de “Anthropocene” y las progresiones y melodías de “Death Atlas”. Sumado a la voz de Travis Ryan, que con sus características vocales parece darle voz a estas cucarachas humanoides, tenemos uno de los discos más anticipados del año.
Definitivamente, se debe escuchar este disco completo, desde el gran inicio que nos da “Terrasitic Adaptation” hasta los diez minutos de “Just Another Body”, de una banda que cada vez se aleja más del grindcore, pero no lo necesita. Ha evolucionado hacia lo más brutal y técnico del death metal, convirtiéndose en un referente que se afianza con este gran disco.